A pesar de que hoy en día, la mayoría de las personas asocia a la figura del animador de películas y series infantiles a alguien sentado frente a un ordenador, no hace demasiados años este trabajo se realizaba de forma completamente artesanal.
Tan artesanal como reflejan las imágenes que aparecen ilustrando este artículo, en las que podemos ver a animadores de diferentes épocas, poniendo divertidas muecas frente a un espejo. Muecas, que a pesar de que parezcan que son fruto del estrés o una locura transitoria, tienen una razón concreta. Y es que, en la época en la que están tomadas estas fotografías, los modelos para las expresiones de los diferentes personajes que aparecían en las películas que tanto nos divertían, eran ellos mismos.
Una magnífica colección, en la que podemos ver a animadores de las tres compañías más antiguas (Walt Disney Productions, Warner Bros y Hanna-Barbera Productions) con la que los niños pueden descubrir que antes de que los ordenadores y la tecnología invadiera nuestra vida, había gente que era capaz de crear las aventuras de Bugs Bunny, Los Picapiedra o Tom y Jerry con la única ayuda de un lápiz, un espejo y su capacidad para expresar emociones.
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